Header Ads Widget

Responsive Advertisement

¿Quién inventó el cómic? ¿Cuál es el primer cómic de la historia? Son dos preguntas difíciles de responder.

Si tenemos en cuenta el cómic tal como lo conocemos hoy día, el primer cómic de la historia es sin duda "Yellow Kid", de Richard Felton Outcault, ya que fue el primero en utilizar bocadillos para expresar los diálogos de los personajes.

Algunos téoricos nombran a Thomas Rowlandson como inventor del cómic, por sus caricaturas satíricas. "El maestro de escuela (Dr. Syntax)" sería la primera obra de algo que podríamos denominar protocómic, publicada en 1809.

Otros teóricos se van un poco más tarde, hasta 1829, hasta Rodolphe Töpffer y su "Voyages et aventures du Docteur Festus".

A Töpffer se le pueden sumar 3 autores más: Cham, Doré y Petit. Y de ellos vamos a hablar en este pequeño acercamiento a los orígenes del cómic.

Rodolphe Töpffer

Nacido en Ginebra en 1799, pedagogo, escritor, pintor y caricaturista, Töpffer fue el primer autor que le dio validez al cómic como cultura. Gracias a la difusión que hizo, teorizando sobre ello, sus álbumes no se quedaron en Suiza, llegando a publicarse en Alemania, Francia y Estados Unidos. En sus propias palabras:

"La historia en cuadros a la cual la crítica de arte no presta atención, y que raramente inquieta a los doctos, no ha dejado en cambio de ejercer una gran atracción. Y esto en mayor grado que la literatura misma puesto que a partir del hecho de que existe más gente que mira que gente que lee, ejerce su atractivo especialmente sobre los chicos y las masas, ese público al que se puede pervertir y que por lo mismo sería particularmente deseable ayudar a educarse. El cuento dibujado, con esa doble ventaja que le viene de su mayor concisión y de su relativamente mayor claridad, puede y debe vencer a otros medios de expresión en tanto puede dirigirse con una actitud realmente viviente a un mayor número de espíritus , y puesto que aquel que lo utiliza —cualquiera que fuera el contexto— tendrá ventaja sobre aquellos que eligen expresarse por medio de libros."

Creo que al estar dirigidos sus álbumes a lectores adultos, consiguió diferenciarlos de los cuentos ilustrados para niños, haciendo que el medio tuviera identidad propia. Pero lo más importante es que Töpffer creó escuela, lo que hizo que el cómic tuviese futuro. Su discípulo aventajado fue Cham.

La primera obra publicada por Töpffer fue "Voyages et aventures du Docteur Festus" (1829). A esta le siguieron "Histoire de M. Cryptogramme", "Mr Pencil", "Histoire de M. Jabot", "The Adventures of Obadiah Oldbuck", "M. Crépin" e "Histoire D'Albert".

Cham

Charles Amédée de Noé, nacido en París en 1818, escogió el acrónimo-pseudónimo Cham para sus publicaciones. Inspirado por Töpffer, Cham empieza a publicar muy joven. Al contrario que el suizo, Cham es apolítico, por lo que su producción es diferente.

También se dirige a otro tipo de público: los protagonistas de sus aventuras suelen ser hombres de clase baja, como tenderos, artistas,..., lejos de los burgueses protagonistas de las obras de Töpffer. Así pues, Cham pone sus obras al servicio del pueblo llano.

Cham se estrenó con "Histoire de monsieur Lajaunisse" (1839), a la que le siguió "Monsieur Mélasse", "Histoire de monsieur Jobard", "Deux vieilles filles vaccinées à marier", "Histoire de monsieur Vertpré et de sa ménagère aussi", "Monsieur Barnabé Gogo", "Aventures de Télémaque, fils d'Ulysse", "Histoire du prince Colibri et de la fée Caperdulaboula", e incluso redibujó "Histoire de M. Cryptogramme" de Töpffer para su publicación en el magazine "L'Illustration".

Gustave Doré

Doré, nacido en Estrasburgo en 1832, fue un niño prodigio del cómic, publicando su primera obra con solo 15 años. Su fuente de inspiración fue, una vez más, Töpffer. Su estilo de dibujo es muy caricaturesco.

Doré se especializó en historias paródicas de viajes, relatando leyendas como las pruebas de Hércules, o una historia muy partidista de Rusia. Sus historias eran de un humor absurdo bastante frecuente en la época, pero no en el medio del cómic. Pronto se alejó del cómic para ser ilustrador.

El primer trabajo de Doré fue "Les Travaux d'Hercule" (1847), seguido de "Trois artistes incompris et mécontents", "Des-agréments d'un voyage d'agrément" e "Histoire pittoresque, dramatique et caricaturale de la sainte Russie".

Léonce Petit

Petit nace en la Bretaña francesa en 1839. Llamado a menudo el Töpffer francés, se puede deducir fácilmente quién fue su principal fuente de inspiración.

Petit habla en sus historias de la Francia rural y provinciana, sobre todo de Normandía y de su Bretaña natal. Historias simpáticas y campechanas combinadas con otras totalmente humorísticas y absurdas. Petit dibujó a lo largo de toda su vida, en ocasiones colaborando con otros autores.

Debuta con "Le Roman d'une cuisinière raconté par son sapeur" (1866), a la que le sigue una lista demasiado larga para ponerla aquí. Por nombras algunas: "Les Mésaventures de M. Bêton", "Les Bonnes gens de province", "La Conversion de monsieur Gervais".

Bibliografía y opinión

Gracias a la wikipedia francesa, la imprescindible web "Los primeros tebeos" y el genial libro "Los pioneros del cómic: Töpffer, Cham, Doré, Petit", he podido escribir este sencillo artículo. Os recomiendo mucho dicho libro, que combina una pequeña parte teórica con varias historietas de los autores. En la web podéis encontrar información y ejemplos de viñetas y páginas de numerosos autores.

Sinceramente, he aprendido muchísimas cosas que no sabía, ha valido la pena investigar un poco sobre estos autores. ¿Quién me iba a decir a mí que el cómic había surgido en Suiza?

Post a Comment

Artículo Anterior Artículo Siguiente